Las máximas autoridades de la Unión Cívica Radical (UCR) cargaron ayer contra el ombudsman, Hugo Cabral, por un dictamen relacionado con la eventual sucesión de la legisladora radical Silvia Elías, electa diputada nacional en octubre pasado.
El defensor del Pueblo había dado el visto bueno a una presentación efectuada por la dirigente Lorena Núñez -sexta en la nómina en la que fue electa la parlamentaria en 2011-, que pretende quedarse con la banca por la Ley de Cupo Femenino. La UCR, en tanto, considera que, de ser necesario, Elías debería ser sustituida por el candidato que la seguía en la nómina, Fernando Valdez -miembro del directorio de Yacimientos Mineros de Agua de Dionisio (YMAD)-.
"Cabral se excede en sus funciones al dar sugerencias al radicalismo. Hay leyes y antecedentes que rigen la cuestión del cupo femenino. Nuestro partido respetará lo que se decida en consecuencia, pero no depende de nosotros esa resolución. O no lo sabe y es un ignorante, o actúa en forma maliciosa con oscuros intereses políticos", fustigaron Raúl Albarracín (vicepresidente) y Juan Roberto Robles (secretario general) en una declaración de la Junta de Gobierno.
Los radicales aseguraron que corresponde a la Junta Electoral Provincial y a la Legislatura determinar quién ocupará la vacante y calificaron de "malintencionado" al informe del ombudsman. Concluyeron que Cabral "responde a los intereses del oficialismo, que busca generar conflictos en los partidos de la oposición".
Durante las últimas semanas, Núñez recibió también una carta de apoyo de Moni Pizoni, Directora Regional de ONU Mujeres.
En octubre, el Acuerdo Cívico y Social ganó dos bancas en Diputados. Cano confirmó que dejará el Senado para asumir. En la UCR se analiza la posibilidad de que Elías de Pérez ocupe el lugar de Cano en la Cámara Alta. Allí se originó la controversia con Núñez.